EL GRITO

El Grito de Munch

(No está dedicado a nadie,
cualquier coincidencia es pura casualidad)

Retrocede Satanás,
la vieja loca imploraba.

Fue un grito de llanto horrendo
que ha desgarrado el silencio,
velado por el cansancio,
de una noche vuelta estruendo,
cuando todos se iban yendo
de la oscura fiesta prava.

Retrocede Satanás,
la vieja loca imploraba.

Desenfrenada corría,
levantando un crucifijo
para resguardar a su hijo
de esa infernal brujería
que empañaba la alegría
de cándida niña esclava.

Retrocede Satanás,
la vieja loca imploraba.

Ese grito espeluznante
es mezcla de ira y pánico
por el influjo satánico
de su enloquecido amante
que sólo murmura jadeante
la pasión que lo frustraba.

Retrocede Satanás,
la vieja loca imploraba.

¿Eso fue enojo o fue antojo?
Quizás fue un acto fingido,
tal vez un hecho afligido;
mas, pronto acaba el enojo,
de nuevo se abre el cerrojo
mientras lejos se escuchaba:

Retrocede Satanás,
la vieja loca imploraba.

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