SED DE LUJURIA

Tengo sed de tu aliento,
del aire que tú respiras
de la brisa que suspiras,
en mi corazón violento.

En las sombras de la noche
te busco con ebrios ojos,
tus ardientes labios rojos
que la furia desabroche.

El pensamiento enmudece
habla lasciva ternura
de un abrazo apasionado.

La lujuria resplandece
placeres de mi locura
en tinieblas del pecado.
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LA MUERTE

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La música en silencio se apagó,
se disiparon todos los colores,
ya no hubo excusa para los errores,
la sombra de la muerte me ciñó.

Ya sin sentido el tiempo se enfrió,
la muerte es sin colores ni fulgores,
tampoco tiene horrores ni dolores,
pero aunque la intuí, no me gustó.

Sé que la muerte tiene mala fama,
pues ella nos despoja de la vida,
y quien no tiene vida, pues ya no ama.

Suerte que aún no es mi hora de partida,
amar la vida es siempre mi proclama
hasta el día de mi despedida.

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COMO EL MAR

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Como el mar es la vida,
es perenne y constante movimiento
mientras fluye atrevida,
es como olas del viento
que la playa deshace sin aliento

Olas del mar que bañan,
besan y arrullan sin cesar las rocas,
fingen que nunca dañan
propias pasiones locas,
como en la vida intensa, no son pocas.

Como el mar es la vida,
con un barco que oscuro se maneja,
son recuerdos que de ida
el horizonte aleja
rumbo adonde el crepúsculo refleja.

Danza el agua su gozo,
por doquier se vea las gotas salpican,
otras en breve sollozo
más precoces abdican,
el hechizo en la vida escenifican.

Mi vida, gotas de agua
en el mar azul sin límite alguno,
que el sol apenas fragua,
dura lo que un ayuno,
pero en el mar eterno me vuelvo uno.
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PLAYA COLORADA

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Viertes agua transparente
sobre la arena dorada

que sonrojas colorada
y deleitas a la gente.

Sol de resplandor ardiente
iluminas la alborada
del mar en mansa ensenada
hasta su orilla indolente.

Playa esencia de mujer,
moza de naturaleza,
dame siempre amanecer.

Caricias con sutileza
quiero en ti satisfacer,
son mis ansias de belleza.

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CERRO EL AVILA

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El Ávila, Wuaraira - Repano aborigen,
Sierra Grande de los oriundos ancestrales,
petrificadas olas gigantes por rituales
para proteger el fértil valle que rigen.

Dominios de la diosa del mar en su origen,
bañaban aguas del Guaire campos florales,
ahora arrastran el barro y miseria de males,
la ciudad en tus pies sus lágrimas te afligen.

Como un gran muro que a la urbe acompañas,
te levantas vestido en piel de verdes aureolas
de variados matices que el paisaje lo bañas.

Desde tu imperturbable grandiosidad arbolas
los espíritus de tus bosques y tus montañas
para que vuelvan los claveles y gladiolas.

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VENEZUELA

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Venezuela, mi bello país adoptivo por elección voluntaria, es tierra de gente alegre y espontánea, extrovertida y sincera, es tierra de libertadores que cabalgaron con la bandera de la independencia a lo alto por toda la América bolivariana, también es tierra de caudillos y dictadores que han marcado la historia del país en toda su extensión.

Pueblo de vehementes contrastes, de muchas luces y colores, lleno de espacios de esperanzas e ilusiones, también de crisis y desengaños, que se arraigan en su variada geografía de montañas andinas, selva tropical, llanos con ríos infinitos y costa que se baña en el mar caribeño. Venezuela es tierra para querer.

Poema

Venezuela de Venecia
como mozuela de moza,
expresión desdeñosa,
palafitos sin iglesia.

Vespucio apenas aprecia
lo que bajo cada choza
ahora es riqueza de diosa
ignota en su peripecia.

Es oro negro entre sales,
el primer barril de instinto
fue exportado sin avales.

Era un brebaje distinto
a aliviar al Rey de males,
la gota de Carlos Quinto.

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LA DUDA

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La duda te corroe,
la incertidumbre el alma te carcome.
¿Renunciar a soñar?
No sabes qué camino adelantar.
¿Dejar la ilusión?
Se propaga la duda y sinrazón.

¿Audacia o prudencia?
Te vuelves soledad y más ausencia,
un silencio sin brío
te sumerge profunda en un vacío
y en tu carne desnuda
sientes con ruda saña fiera duda.

“¿Desde aquí hacia dónde tengo que ir?”,
como Alicia preguntas.
“Pues depende de a dónde quieres ir”,
responde una sonrisa
del mágico minino, que de prisa
del cuento tú apuntas.

Más a ti no te importa demasiado,
le confiesas al gato,
quien te contesta sin ningún enfado:
“En ese caso, da igual el camino,
si avanzas suficiente
alcanzarás algún lugar”, convino.

La duda te divide, te disgrega,
te atrapan pesadillas,
pues no es el país de las maravillas.
El desorden te ciega
y debes elegir sin desacierto
a fin de ir a buen puerto.

Sin embargo, asimismo
la duda despierta el discernimiento,
se abre la conciencia al pensamiento,
y plena de optimismo
la vida te llevará a algún lugar,
pero nunca se puede desandar.

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TRISTEZA

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Siento tu canto como el llanto,
es desaliento de tu pensamiento
como un lamento que extiende el viento
bajo ese manto de tu desencanto.

Naturaleza de tristeza,
alma que vagas por sombras aciagas
sin fortaleza para la grandeza.,
sola te apagas herida de llagas.

Torpe resbalas cuando inhalas
envejecida avecilla derruida
que te regalas aflicciones malas,
tienes perdida toda ansia de vida.

Mi gavina azul, plumas de tul,
eres cautiva en tu jaula opresiva,
triste actitud ausente de virtud,
tan depresiva te hace vengativa.

Rompe cadenas, deja penas,
levanta vuelo hasta lo alto del cielo
donde azucenas adornan serenas,
dulce anhelo de albedrío sin velo.

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